De Comienzos Modestos a una Expansión Rápida
El self-storage en España ha recorrido un largo camino desde principios de los 2000, cuando el concepto llegó al país por primera vez. Lo que comenzó como un servicio de nicho, con solo unas pocas instalaciones en ciudades como Madrid y Barcelona, se ha convertido en una parte reconocida del panorama inmobiliario. En un inicio, la idea de alquilar espacio extra fuera del hogar era extraña para muchos españoles. A diferencia de Estados Unidos o el Reino Unido, donde el self-storage llevaba años consolidado, en España el sector tuvo que superar barreras culturales y la falta de demanda generalizada.
Con el tiempo, la urbanización, los cambios en los estilos de vida y las nuevas tendencias de vivienda impulsaron su crecimiento. Más españoles comenzaron a ver el self-storage como una solución práctica tanto para necesidades temporales como a largo plazo, ya sea para mudanzas, reformas, inventario de negocios o simplemente para despejar espacio en hogares cada vez más pequeños. Esto llevó a un crecimiento constante, con la expansión del sector no solo en las grandes ciudades, sino también en las áreas suburbanas.
Sin embargo, lo que ha ocurrido en los últimos dos años no tiene precedentes. Desde 2022, la capacidad de self-storage en España ha aumentado un 50 %, un salto impresionante para una industria que antes avanzaba a un ritmo más moderado. Según un informe de FEDESSA y CBRE de 2024, el espacio de self-storage en España creció de 1,3 millones de metros cuadrados en 2022 a 1,9 millones de metros cuadrados hoy en día. Este avance ha consolidado a España como el cuarto mayor mercado de self-storage en Europa, solo por detrás del Reino Unido, Francia y Alemania.
Urbanización y Nuevas Necesidades de los Consumidores
El boom del self-storage en España está estrechamente relacionado con tendencias urbanas y sociales. Ciudades como Madrid y Barcelona están entre las más densas de Europa, con viviendas cada vez más pequeñas y precios inmobiliarios en aumento. A medida que los hogares se hacen más compactos y la asequibilidad se convierte en un desafío, muchos residentes necesitan espacio extra, pero no pueden permitirse casas más grandes.
Aunque eventos como mudanzas, downsizing o herencias siempre han impulsado la demanda de self-storage, en los últimos años ha habido un cambio cultural importante. Lo que antes era visto como un lujo o algo innecesario, ahora se percibe como una extensión del hogar o el lugar de trabajo.
Además, las empresas han sido clave en este crecimiento. El auge del comercio electrónico y el dinamismo del sector PYME en España han incrementado la necesidad de soluciones de almacenamiento flexibles. En lugar de alquilar costosos almacenes, muchas empresas prefieren el self-storage para gestionar inventario, stock estacional y logística.
¿Por Qué Ha Crecido un 50 % en Solo Dos Años?
Aumento de Inversiones y el Interés Institucional
Uno de los principales factores detrás de este crecimiento acelerado ha sido el aumento en la inversión, tanto nacional como internacional. Fondos inmobiliarios, firmas de capital privado e inversores institucionales han puesto el foco en el self-storage, reconociendo su potencial como un activo resiliente y con alta demanda.
Este flujo de capital ha llevado a estrategias de expansión agresivas. Los operadores están adquiriendo instalaciones más pequeñas, modernizando sitios existentes y abriendo nuevas ubicaciones a un ritmo sin precedentes, tanto en el centro de las ciudades como en áreas suburbanas.
Instalaciones Automatizadas y Gestión Externa
Otra clave del crecimiento ha sido la adopción de modelos de self-storage sin personal, impulsados por la tecnología. Ahora, muchos operadores gestionan todo de forma digital: los clientes pueden alquilar unidades, acceder a ellas y gestionar sus cuentas en línea. Esto ha permitido a las empresas escalar más rápido y reducir costos operativos, haciendo viables ubicaciones que antes no lo eran.
Al mismo tiempo, los servicios de gestión externa han ganado terreno. Empresas especializadas se encargan de la operación diaria de las instalaciones, permitiendo que los propietarios e inversores se concentren en expandir sus carteras.
Expansión en el Centro y en las Afueras
El crecimiento en España es notable porque está ocurriendo en paralelo tanto en áreas urbanas como suburbanas.
- Instalaciones en el Centro
En ciudades como Madrid, Barcelona y Valencia, los operadores están reutilizando plantas bajas, antiguos almacenes y sótanos para crear instalaciones de self-storage. Estas unidades ofrecen comodidad y fácil acceso, ideales para clientes urbanos que necesitan soluciones rápidas. Con alquileres promedio de €35 por metro cuadrado, estas instalaciones generan buenos retornos y suelen atraer a clientes de corto plazo. - Complejos Suburbanos
En las afueras, las instalaciones más grandes están creciendo rápidamente, con espacios que superan los 3,000–5,000 metros cuadrados. Estas unidades, con alquileres de unos €23 por metro cuadrado, son ideales para familias y empresas que necesitan más espacio. Gracias a su escala y menores costos de terreno (entre €500 y €1,000 por metro cuadrado), estos complejos son generadores de flujo de caja a largo plazo.
Reflexiones Finales: Una Industria en Modo Expansión
El self-storage en España ha evolucionado enormemente desde sus comienzos modestos. Si bien en las últimas dos décadas el crecimiento fue constante, los últimos dos años han marcado un antes y un después, con un aumento explosivo impulsado por la demanda, la inversión y el cambio en los hábitos de los consumidores.
Aunque el sector aún no alcanza los niveles de adopción generalizada que tienen el Reino Unido o Estados Unidos, está claro que España está en la senda de un crecimiento sostenido. Con una mayor densidad urbana, presiones inmobiliarias y avances tecnológicos que hacen el negocio más eficiente, el self-storage se está consolidando como una parte esencial del mercado inmobiliario español.
Referencias
FEDESSA & CBRE (2024). European Self Storage Annual Survey.
Cinco Días (2024). “El mercado de trasteros aumenta su capacidad un 50% en España en solo dos años.”
El País (2024). “El bum de los trasteros: ¿solución o parche a la falta de espacio en casa?”